Cual no fue mi sorpresa al ver que tenia coquinas,algo muy poco habitual en Madrid.
Cuando bajo a Huelva,a menos que haya veda,este es uno de los platos que nunca perdono.
Es todo un placer sentarse en una terraza con unas cervecitas y una ración de coquinas al ajillo.
Pues nada,que me ha entrado algo de nostalgia y las he comprado para hacerlas esta noche.
Vamos a necesitar:
- 300 gr de coquinas.
- 4 o 5 dientes de ajo picados.
- Un chorro de aceite de oliva.
- Un chorrito de vino blanco.
- Una cucharadita de perejil picado.
Preparación:
Es recomendable tener las coquinas en remojo,cubiertas con agua y un poco de sal,unas horas antes.Así soltaran la arenilla si la tuvieran.
Escurrimos las coquinas y reservamos.
En una sartén amplia ponemos un buen chorro de aceite de oliva,y en este,los ajos picados.Doramos a fuego vivo.
Una vez los ajos están doraditos añadimos las coquinas y vamos removiendo hasta que se hayan abierto.
Añadimos un chorrito de vino blanco y una cucharadita de perejil picado.
Removemos y dejamos cocer unos minutos.
Retiramos a una fuente y comemos inmediatamente.
Aprovechad el momento para hacer unos"barquitos"en la salsa.Mientras vosotros os entretenéis con el pan...yo me comeré las coquinas...jejejej!.
Que ricas.... Esta noche las haré, pondré pan rico y así se entretienen y yo me como las coquinas Mmmm Gracias por la receta.
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